REVISTA DE LIBROS
JAMES, Daniel; Doña María.
Historia de vida, memoria e identidad política, Manantial, Buenos Aires,
2004, 291 pp..
Mediante
una notable renovación de las perspectivas de abordaje historiográfico, Daniel
James propone con esta obra de investigación histórica la apertura de una
fecunda línea de análisis en torno a la controvertida cuestión de la relación
entre la clase obrera y el peronismo y, más específicamente, a los modos en que
desde su propia situación presente una trabajadora la resignifica al momento de
relatar la historia de su vida, así como a los variados mecanismos sociales de
construcción de la memoria sobre ella y el marco histórico que la incluye
instrumentados por una comunidad obrera.
La
combinación del empleo del testimonio personal con el de fuentes iconográficas,
fílmicas y literarias configura una original manera de encarar la práctica de
la historia oral que permite al autor ingresar en el universo de
representaciones formuladas por María Roldán (una obrera de la industria de la
carne que vivió y trabajó en Berisso entre 1930 y 1989 y formó parte de la
vanguardia del movimiento que protagonizó el 17 de octubre, desempeñándose
luego como una dirigente sindical y política clave para el peronismo local) en
torno a su participación en el proceso histórico y producir un análisis
sumamente rico sobre las vicisitudes de la historia de su vida,
contextualizadas en el tejido de las relaciones sociales de las que ella ha
formado parte, y sobre el contradictorio modo en que ha experimentado la
realidad y rememora esa experiencia, enmarcadas en la no menos paradójica trama
de la memoria colectiva de aquel espacio urbano. De esta forma, James compone
con trazos de verdadero artista una vivida imagen de esta historia, dotando a
su trabajo de por lo menos dos cualidades originales: una explícita renuncia a
la posición de juez implacable del sentido de la memoria que reconstruye
-aunque ello no implique resignar sus pretensiones de verdad- y una ajustada
correspondencia entre el anclaje local de sus reflexiones y el relato nacional
más general al que las mismas se refieren.
En esta tónica, en el Prólogo del libro, su autor señala que la historia de vida de doña
María se halla modelada por los principios morales, las fuerzas ideológicas y las
experiencias históricas conmemoradas en los principales “paisajes de la
memoria” de Berisso, a través de sus murales, estatuas y monumentos: su Centro
Cívico y la Plaza 17 de Octubre, sobre cuyas notas distintivas realiza un
profundo análisis, retratando con minuciosidad los diversos elementos por medio
de los cuales dichos espacios aluden a la memoria colectiva de esta comunidad
obrera.
En su segunda parte, compuesta íntegramente
por la transcripción de buena parte del Testimonio
de doña María, el estudio expone la historia de vida de esta trabajadora
según su propio relato. De ningún modo puede considerarse que el historiador
simplemente “deje hablar” a la narradora; primero, porque su propia posición
subjetiva impregna la investigación ya desde el momento en que la interpela de un modo particular y,
segundo, porque indica las claves de la lectura del testimonio, en tanto hilo
de la red de relatos que constituyen la historia de Berisso y la singular
expresión de los perfiles y las huellas del contexto cultural, ideológico y
moral legados por la ciudad. No obstante, tampoco puede pensarse la producción
del relato en términos de un absoluto condicionamiento del entrevistador sobre
su entrevistada, pues en numerosas ocasiones a lo largo del análisis aquél advierte
sobre la negociación de significados constitutiva de cualquier situación de
entrevista.
La tercera parte del trabajo está integrada
por cuatro Ensayos interpretativos
mediante los cuales James propone su propia
lectura de las rememoraciones de doña María, tarea que claramente ubica como
núcleo de la especificidad del oficio de historiadoras e historiadores.
En el primero de estos ensayos -y como parte de la construcción de un marco
teórico y metodológico afín a la recuperación de voces generalmente silenciadas
en la historiografía- presenta un elaborado examen en torno a los problemas
vinculados al oficio de las y los científicos sociales cuyos análisis refieran
a la memoria. También examina “sitios” que invocan procesos de conmemoración
diferentes a los derivados de la entrevista oral y realiza inspiradoras
reflexiones en cuanto a sus posibles usos en la producción de conocimiento.
Finalmente, revisa la compleja cuestión de los mandatos implicados en el
proceso de recuperación de los recuerdos y de su transmisión en comunidades de
clase obrera como la de Berisso, que han sido víctimas de la
desindustrialización y la dislocación social.
En el segundo ensayo, James analiza los
patrones que estructuran el testimonio recogido y los dispositivos narrativos
por medio de los cuales dichos patrones se expresan. A partir de tal análisis
señala las diversas estrategias que permiten a su entrevistada legitimar su
posición individual, así como las tensiones inherentes al proceso de
resignificación de su experiencia que subyacen en dichas estrategias,
refiriéndose especialmente a la contradicción entre el patrón clave del relato,
aquel que marca el compromiso con la militancia social y política dentro del
movimiento peronista, y otros patrones más oscuros, centrados en una serie de
decepciones y traiciones sufridas a lo largo de su vida por los propios
dirigentes de éste.
Los dos ensayos restantes brindan una
aproximación sumamente original en el contexto de una historiografía que en
general ha excluido a las mujeres, por cuanto el autor asume que tanto la
vivencia como el relato se relacionan con una multiplicidad de determinaciones,
entre las que cuenta una identidad de género construida en dialéctica
vinculación con la de clase. Así, en el tercero de ellos, demuestra en la
historia de doña María la existencia de profundas tensiones entre la concreta
experiencia cotidiana de las relaciones de género, por un lado, y los modelos
culturales disponibles para expresarla, por otro; tensiones éstas que derivan
en una contradicción irresuelta entre la asunción de un rol femenino
tradicional y el cuestionamiento del mismo, expresado en la apropiación de
atributos y tareas considerados por la sociedad como intrínsecamente
masculinos, así como en silencios, borraduras y temas conflictivos al interior
de la narración.
En el último ensayo, James da cuenta, por
medio de la interpretación de un poema escrito por doña María, de las
potencialidades y dificultades inherentes a la utilización de textos literarios
como fuente de construcción de conocimiento sociohistórico. En tal sentido,
analiza los elementos que considera componentes cruciales de la construcción
del contenido y el significado (sus aspectos retóricos, sus recursos
lingüísticos y su forma y género) para mostrar que el texto expresa la
construcción discursiva formal del trabajo de las mujeres -transmitida desde
diversos ámbitos de la cultura popular y la retórica estatal- pero también
contiene elementos de un contradiscurso, pues transgrede en diversos aspectos
las convenciones de género que le sirven de marco. Es importante aclarar que, a
pesar de su interés a este respecto, el autor se distancia de modo expreso de
las posiciones sustentadas por los partidarios del giro lingüístico, pues
revaloriza lo característico de un oficio en el que resulta vital la
aprehensión del contexto que se manifiesta, se refleja o se refracta en los
textos y en esa dirección también aborda las condiciones de producción de dicho
poema.
El libro finaliza con un Epílogo, donde el autor aporta nuevos fundamentos para complejizar
el análisis de los modos conmemorativos en Berisso, aludiendo a la fragilidad
que en el contexto social y político presente poseen los “paisajes de la
memoria” anteriormente descriptos para evocar el pasado y proponer un significado,
en tanto y en cuanto los tradicionalmente asignados al peronismo en esa
comunidad se han transformado en una era de desindustrialización y marginación
social y económica, resultado en buena medida de la política de los propios
gobiernos justicialistas durante los años ‘90, los cuales, al contribuir con el
debilitamiento de la influencia de los hitos clave del peronismo a nivel
colectivo, se han constituido como un punto de inflexión para una identidad
política obrera centrada en los lazos emocionales generados por una memoria y
una tradición comunes.
Como
corolario de la enriquecedora mirada que fundamenta la construcción de cada uno
de los capítulos, el estudio resulta ineludible para aquellas y aquellos
interesados en profundizar su conocimiento en torno a las continuidades y los
cambios inherentes a la relación entre la clase obrera y el peronismo, por
cuanto remite a las distintas esferas en que la percepción de las y los
militantes de esa fuerza política se revela contradictoria y ambigua. En tal
sentido, su autor hace gala de una singular agudeza en el tratamiento
cualitativo de las múltiples dimensiones que subyacen en las ideas y las
acciones humanas, abordaje que gana en intensidad precisamente porque ajusta el
foco hacia una experiencia individual considerada en el marco de la sutil
dialéctica establecida entre ella y los datos “estructurales” como dos partes
inescindibles de una misma realidad social.
Por
Débora Cerio
(CEHO
- UNR, rayuela63@hotmail.com)
CALVEIRO, Pilar. Política y/o violencia. Una aproximación a
la guerrilla de los años 70.
Norma, Buenos Aires, 2005. 192 p.
Los textos que se preocupan
por las organizaciones armadas han transitado un laborioso itinerario en la
historiografía argentina, y logrando posicionarse en un lugar relevante en los
anaqueles de las Ciencias Sociales. Una “periodización” sobre la consideración
que mereció en el ámbito académico la historia de la guerrilla, iría desde la
casi absoluta negación durante los primeros años ochenta, a la “aceptación
social” del problema a mediados de los noventa; finalmente llegaríamos al sitio
en el que se inscribe el libro de Pilar Calveiro, que constituye una tendencia
mas reciente aun: el ejercicio del cuestionamiento del accionar de la guerrilla
hecho por los propios setentistas.
Anteriores textos de la
autora (politóloga, docente en la Universidad Autónoma de Puebla, México) ya
han circulado por otras aristas de este tema: Poder y desaparición, Redes
familiares de sumisión y resistencia y Familia
y poder1, y también algunos artículos de carácter mas bien
teórico sobre los debates acerca de la memoria. En Política y /o violencia articula varios de estos problemas a través
de una suerte de historización de la violencia en el país desde principios del
siglo XIX; sobre este punto pareciera que su interés inicial es la violencia
ejercida desde el poder político. La hipótesis que sostiene esta preocupación
es uno de los aciertos del libro: la violencia como un eje estructurante de la
historia del país, poniéndose en las antípodas de la tesis según la cual la
violencia emerge a raíz de los hechos armados de las décadas de 1960 y 1970 del
siglo XX.
Violencia
y/o política... se presenta organizado en dos grandes apartados,
precedidos por una introducción en la que Calveiro propone sus hipótesis,
adelanta su posición acerca del accionar de las organizaciones armadas y
convoca a los propios actores a retomar la palabra en forma de crítica, puesto
que para la autora la dictadura que se abrió en 1976 fue el resultado de un
proceso anterior en el que involucra a los grupos guerrilleros como fenómeno
inseparable de esta historia, “para pasar a un análisis de su práctica y lo que
considero sus responsabilidades específicas en el desastre final” [Calveiro,
2005; P. 13]. Sería discutible afirmar que la autora puede ser sospechada de
tributar a la “teoría de los dos demonios”; sin embargo, buena parte del libro
indica eso: la insistencia en la violencia ejercida por los miembros de la
dictadura militar por una parte, y las organizaciones armadas, por la otra
parecieran ir en ese sentido, especialmente si advertimos que la gran ausente
en su análisis es la propia sociedad argentina, de la cual indudablemente
emergieron las organizaciones armadas, pero que especialmente eran partícipes
de la creciente conflictividad social del período.
En “Rehistorizar el pasado”,
Calveiro recorre la historia argentina desde los años treinta hasta entrados
los ochenta a través del eje conductor del uso de la violencia al que recurrió
el poder militar para imponer lo que no se lograba por consenso: la “década
infame”, la “Revolución Libertadora”, los gobiernos elegidos con el amparo que
otorgaba la proscripción del peronismo, y la dictadura de la “Revolución
argentina”, en la que se detiene especialmente, primero para dar cuenta de la
emergencia de las primeras organizaciones armadas como respuesta a la violencia
militar, y luego para destacar que las Fuerzas Armadas fracasaron en su intento
de sanear lo político, debiendo
recurrir a una estrategia como el GAN –también abortado- y el consecuente
llamado a elecciones libres. Del período 1973 a 1976 destaca el Pacto Social
(sus defensores y detractores y las pugnas políticas y económicas que lo
condicionaron y llevaron al naufragio), y la represión ilegal promocionada por
el propio gobierno peronista, dirigida tanto a las organizaciones armadas como
a los trabajadores y sindicalistas opositores a la burocracia sindical. Según
Calveiro, el golpe de Estado de 1976 comparte con los anteriores
características y condiciones de emergencia, pero a su vez presenta
particularidades propias, por ejemplo, que durante el “Proceso”, por primera
vez, las Fuerzas Armadas intervinieron para desarrollar una propuesta propia
apoyada alternadamente por las fracciones de la clase dominante. Cierra esta
primera parte con un mapeo por las estrategias de disciplinamiento social y
militar desde principios del siglo XIX, puntualizando las prácticas de la
última dictadura.
La segunda parte del libro
esta dedicada a las organizaciones armadas. Con el sugerente título de “La
desobediencia armada”, Calveiro señala los orígenes, características,
referencias políticas y prácticas político-militares de la guerrilla argentina.
Si bien hace mención a buena parte del arco de las organizaciones armadas, se
ocupa especialmente de las más gravitantes en los años ’70: PRT-ERP y
Montoneros, y se detiene ampliamente en esta última. El cierre del trabajo lo
dedica al proceso dictatorial, desarrollando el caso particular de Montoneros
en el período 1976-1980.
Mucho se ha dicho acerca de
la existencia de un pacto entre el
autor y el lector, aquel que nos advierte qué tipo de texto estamos leyendo. No
esperamos criterios de verdad en un
libro de ficción, ni extensas citas bibliográficas en un ensayo. Pero sí
buscaremos trabajo de fuentes, mención a las mismas, hipertextualidad, etc. en
un material que tiene pretensiones de aseverar
sobre aquello acerca de lo que escribe.
A lo largo de las casi 200
páginas de Violencia y/ o política...
Calveiro no logra una buena articulación entre sus identidades de politóloga y
ex militante de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y Montoneros. De hecho, si
careciéramos de toda información sobre la autoría, no podríamos afirmar
certeramente que el libro está escrito por una cientista social, o por una ex
militante.
El libro en cuestión se presenta inicialmente como “un ejercicio de
memoria, no una historia, sobre las circunstancias que llevaron al momento de
mayor violencia política en Argentina...” [Calveiro, 2005. P. 12], o sea que
luego de leer la Introducción confiamos encontrar precisamente eso, un texto en
el que la autora realice un ejercicio de memoria, poniendo en juego sus
vivencias como ex militante, elaborado tal vez en primera persona (singular o
plural), narrando una experiencia propia, del momento y el lugar en el que
activó como militante. Aquí está transgrediendo el pacto: no hay menciones en el libro sobre su paso por la
organización que más se ocupa de enjuiciar.
Pero tampoco podríamos caracterizar el libro como un texto de
investigación histórica, puesto que buena parte de las tesis no están amparadas
por la metodología propia de esta disciplina –aunque se recurre a algunos
documentos de Montoneros-. Tal vez una de las sorpresas más inesperadas sobre
este punto es el carácter de la bibliografía a la que recurre para elaborar el
contexto del problema, puesto que el trabajo de De Riz2 con una
marcada perspectiva institucionalista no provee el marco más ajustado para el
despliegue de un fenómeno como el de las organizaciones armadas (eso si
pensamos que las organizaciones armadas han sido un fenómeno social). Lo mismo
puede decirse de las referencias a la biografía de Mario Santucho3
escrita a principios de los años noventa por María Seoane. Se trata sin dudas
de un buen trabajo de investigación periodística, pero dista bastante de ser un
abordaje complejo sobre la experiencia del PRT-ERP, partido y ejército
respectivamente, liderados por Santucho, como para constituirse en la única fuente
sobre el tema, sobre todo si tomamos en cuenta algunas de las afirmaciones de
Calveiro sobre esta organización4.
Ya hacia el final del libro (“Cerco y aniquilamiento”), Calveiro
asevera sobre los sentires de los
militantes. ¿Basada en qué elementos hace tales afirmaciones?, ¿cuál es su
representatividad?, ¿entrevistas?, ¿recuerdos personales?. Tal vez en este
punto la autora no es del todo clara: consideramos que Violencia y/o Política... no es un trabajo de investigación ni una
memoria de militante. Incumple uno de los ejes centrales del pacto entre autor y lector.
Violencia
y/o Política pareciera tener más de un destinatario entre los que se encuentran
los ex militantes de las organizaciones armadas a quienes reclama retomar la
palabra a fin de que sus memorias no queden relegadas solamente al espacio
privado, puesto que tienen el deber de la transmisión; pero indudablemente las
flechas apuntan a las direcciones políticas y militares de la guerrilla,
especialmente la de la organización a la que la autora pertenecía; Calveiro
demanda a Mario Firmenich explicaciones sobre la estrategia para sacar a los
militantes del país desde 1976 y el propio compromiso de los dirigentes
(incluyendo las sospechas de infiltración); en suma, afirma la responsabilidad
de la conducción en la derrota del proyecto político de Montoneros y en la
indefensión de sus militantes después del golpe de Estado.
La preocupación por lo
político se halla en el centro de sus hipótesis; muestra de ello es la tesis
que articula el trabajo, según la cual las organizaciones armadas de los años
’70 habrían sufrido de carencia de política, “en el sentido de lo común y lo
público”, que debería haber subordinado la violencia al consenso. Como el caso
que más le preocupa es Montoneros, la hipótesis adquiere más precisión cuando
afirma que la derrota de esa organización no se debió al exceso de lo político,
sino a su ausencia. La tesis según la cual lo militar habría fagocitado a lo
político no es la primera vez que se menciona, de hecho trabajos bastante
anteriores sugieren algo similar5.
A pesar de que la autora
insiste en que Montoneros es el principal objeto de su texto, en varias
ocasiones Calveiro escribe sobre la
guerrilla, como si tal cosa existiera: el fenómeno de las organizaciones
armadas fue complejo, amplio y especialmente muy heterogéneo, y esa multiplicidad se hallaba también en la lectura
política sobre la realidad nacional e internacional, sobre qué tipo de sociedad
se pretendía construir y los modos de llevar a cabo el proyecto.
En una entrevista realizada
a propósito de la publicación del libro, Calveiro proponía el “autoescrache a la militancia”. Ese mismo es
el espíritu de uno de los párrafos finales, cuando nuevamente menciona la
“responsabilidad” de los militantes, esta vez sí usando el nosotros.
Violencia y/o política... interpela a quienes estudiamos el período
desde la perspectiva según la cual la guerrilla fue un emergente de la sociedad
argentina, que surgió del propio entramado social, nutriéndose de tradiciones,
cultura política e ideas de los sectores sociales a que los que pertenecían sus
militantes, y fundamentalmente habiendo sostenido un diálogo y vínculo
estrechos con la clase obrera. También abre un arco de preguntas para quienes
destacamos el valor de los testimonios como fuente para la investigación
histórica, pero especialmente por su importancia política y social: durante los
inicios de la transición democrática, las voces de los ex militantes han sido
las que, muchas veces en soledad, sostuvieron las denuncias, mantuvieron
presentes los temas de la represión (antes y durante la dictadura), las
experiencias, memorias y proyectos de la generación de los setenta. El texto de
Calveiro se convierte de este modo en todo un desafío.
Laura Pasquali
(UNR - Conicet - ISP 3). lpasquali@tower.com.ar
Notas
[1] 1998, 2004 y 2005 respectivamente.
2 DE RIZ, Liliana, La política en suspenso. 1966/1976. Buenos Aires, Paidos, 2000.
3 SEOANE, María. Todo o nada. La historia secreta y la
historia publica del jefe guerrillero Mario Roberto Santucho. Buenos Aires, Planeta, 1992.
4 Por ejemplo, las reiteradas menciones al
PRT-ERP como “organización trotskista”, sin mencionar momentos, discusiones
internas, etc. Aquí la autora está siguiendo el escrito de Seoane, que a su vez
en lo que refiere a los lineamientos políticos, tributa casi exclusivamente al
libro de Luis Mattini sobre el PRT-ERP.
5 MOYANO, María José. Argentina’s Lost Patrol. Armed Struggle,
1969-1979. New Haven, Yale University Press, 1995; en menor medida
y con algunos matices: OLLIER, María Matilde. El fenómeno insurreccional. CEAL, Buenos Aires, 1986.
RONIGER, Luis y SNAJDER, Mario; El legado de las violaciones de los
derechos humanos en el Cono Sur. Buenos Aires, ediciones Al Margen, 2005.
"Mirar hacia el
pasado" pareciera ser uno de los lemas de la sociedad contemporánea, el
eje sobre el cual se articulan sus demandas actuales; esto es particularmente
cierto en sociedades que han sobrevivido a un pasado reciente traumático (que
aún perdura como marca). Ese "revisitar" su propia historia se ha
traducido, por lo menos en Argentina, en una profusa edición de obras de
distinto tenor que pretenden abordar esta cuestión desde perspectivas diversas.
Así, la obra de los sociólogos Luis Roniger y Mario Snajder se enmarca en esa
nueva coyuntura.
El libro El legado de las violaciones de los derechos humanos en el Cono Sur,
analiza el problema del pasado reciente desde aquello que los autores llaman el
"incómodo legado": las violaciones de derechos humanos. Sustentada en
una propuesta comparativa de los casos de Argentina, Chile y Uruguay, la
hipótesis central del trabajo plantea que frente a las secuelas de ese pasado
se han dado una multiplicidad de estrategias desde el Estado cuyo objetivo es
"resolver" ese legado, marcando que esta multiplicidad de respuestas
surgen de la propias experiencias históricas, de las políticas oficiales, de
los intentos de reconciliación y reparación, de los organismos e instituciones
sociales que presionan en búsqueda de verdad y justicia que hacen que cada caso
muestre sus particularidades dentro de un marco general de transiciones a la
democracia. Asimismo sostienen que estas respuestas sólo han resuelto
parcialmente la relación de la sociedad con ese pasado traumático provocando
crisis recurrentes que llevan nuevamente a la confrontación del pasado y al
resurgimiento de la problemática de derechos humanos.
La obra se compone de ocho
capítulos, los siete primeros realizados para la edición publicada
originalmente en inglés (y para un público menos "empapado" por estas
problemáticas) y el último se agrega a la edición en español intentando dar una
vuelta más a esta temática a partir de los cambios coyunturales acaecidos desde
fines de la década del ’90 hasta la actualidad. Los primeros dos capítulos analizan
el devenir histórico que llevó al colapso democrático, las dictaduras militares
y sus marcos represivos así como las posteriores transiciones democráticas
haciendo énfasis en las diferencias en torno a la salida de los militares del
poder que condicionaron no sólo el lugar que tendrían en las futuras
democracias sino la posibilidad de juzgamientos de los actos de lesa humanidad.
El tercer capítulo retoma la conflictividad de asumir ese legado a partir de
las políticas de memorias oficiales y su impacto en la esfera pública nacional,
las presiones desde la sociedad, los intentos desde el Estado de cerrar los
debates en torno al pasado y el inicio de los juicios internacionales. El
capítulo cuarto analiza la necesidad del Estado de reconstruir la trama democrática
a partir de diversos aspectos. Entre estos aspectos retoman las políticas de
reparaciones en relación a las víctimas de represión, las posibilidades
constitucionales de continuidad o reforma en relación a ese pasado, el problema
de la violación a los derechos humanos en la democracia y las políticas
educativas llevadas adelantes. El capítulo quinto propone abordar las
diferencias en los derroteros de cada país en torno a la violación de derechos
humanos a partir de la potencial influencia y/o precedente que cada caso marcó
para los restantes, enfatizando en la posibilidad de pensar ciclos de políticas
de memoria y olvido a nivel regional que aúna estas experiencias. El sexto
capítulo reflexiona sobre las luchas por las memorias - en constante confrontación
- de diversos sectores y actores sociales a partir del abordaje de propuestas
culturales, fechas conmemorativas, creación de organismos de Derechos humanos,
apropiación simbólica de espacios. El séptimo capítulo plantea la necesidad de
estas sociedades de repensar su propio pasado a fin de resignificarlo en la
construcción de una identidad colectiva fragmentada por este pasado traumático.
El último capítulo aborda las políticas y luchas por las memorias llevadas
adelante en el último lustro a fin de poder integrarlo a esta visión general
sobre lo conflictivo que ha sido este legado para las sociedades
redemocratizadas.
Los ejes en los cuales los
autores se sostienen para analizar los casos permiten al lector reflexionar
constantemente en clave comparativa. Este es el punto más fuerte del trabajo en
tanto permite encuadrar en un marco mas general no sólo las políticas
represivas llevadas adelantes por los gobiernos militares sino la
resignificación de ese pasado traumático en una sociedad específica, permitiendo
así considerar las diversas estrategias y/o semejanzas entre las políticas
llevadas adelante por los estados así como las respuestas que las sociedades
dan a esas políticas. En este sentido, es destacable poder reconsiderar la
historia reciente de un país no como un caso único, exclusivo y excluyente sino
como parte de una coyuntura en donde se suceden otras estrategias ante el mismo
interrogante, ¿qué pasó?, y el mismo reclamo: justicia.
Sin embargo el trabajo adolece
de algunos puntos débiles que no deben ser soslayados. En primer lugar la poca
profundización en los casos específicos que si bien son abordados de una manera
general, para un lector poco aguzado en estas temáticas puede llevar a visiones
parciales sobre las políticas que se han llevado a cabo. En este sentido, el
trabajo es débil en el análisis de la creación de las comisiones de verdad, sus
objetivos y discursos que nos permitirían sustanciar aún más cuál ha sido la
versión oficial sobre ese pasado. Reconociendo que este trabajo no tuvo como
objetivo originario un público conocedor de estas problemáticas, es posible
pensar que los autores han intentado resumir cuáles han sido los derroteros de
un modo más superficial dejando de lado los debates más finos. Por otro lado,
un tema recurrente a lo largo del trabajo es el problema de la reconciliación
nacional que según los autores aparece como premisa en cada uno de los casos
referidos. Es necesario destacar la necesidad de un debate más profundo y
amplio sobre las implicancias de estos intentos de reconciliación nacional, los
alcances posibles de cada uno de los gobiernos y los potenciales de aceptación
o rechazo en cada una de las sociedades, un debate de este tenor nos permitiría
abordar desde una perspectiva teórica estas cuestiones propias de sociedades
que sobreviven a un pasado traumático y permitirnos abrir algunos interrogantes
cuyo sabor nos es amargo ¿es posible la reconciliación? ¿es posible la
Justicia?
Laura Luciani
(CEHO - UNR, luciani@alternativagratis.com)
GODOY, Cristina y LABORANTI, María Inés
(compiladoras), Historia & Ficción, Rosario, UNR Editora -
Universidad Nacional de Rosario, 2005, 214 p.
Historia & Ficción corporiza los avatares de la reflexión
teórico-metodológico-epistemológica interdisciplinaria. Tal aseveración resulta
válida en tres sentidos primordiales.
En primer lugar, su edición implica el corolario a un proyecto
centrado en la articulación entre Teoría de
En segundo término, el libro explicita sus fundamentos y el
anclaje de su perspectiva en el pensamiento de las disciplinas sociales
contemporáneas. El capítulo 1, “
En tercera instancia, el texto se erige en disparador para el
estudio, el debate y la continuidad en la exploración del área. Las profesoras
Godoy y Laboranti compilan y traducen una fecunda selección de artículos
producidos en sede norteamericana, pertenecientes a varios de los más prestigiosos
y polémicos especialistas actuales en la materia, algunos de los cuales hallan
aquí su difusión inaugural en español.
En el capítulo 2, “Teoría Literaria y Escritura de
Los capítulos 3, “
El capítulo 5, “La circulación de
La entrevista de Ewa Domanska a Franklin Ankersmit, incluida en
dossier, se inviste como piedra de toque idónea para el volumen. El teórico de
la historia revela pormenorizadamente el decurso de su vida intelectual desde
la adolescencia, sus frustraciones y anhelos, proporcionando un modelo tangible
y a la vez complejo para arribar a la más alta comprensión de
Se acompaña una noticia de los autores y un glosario, herramienta
indispensable para el acceso del estudiante que se inicia en la investigación
de este orden controversial, pero asimismo contrafuerte que apuntala el
entramado categorial de la obra, cuya coherencia aspirará a contrastar el
perito.
Por Roxana C. Mauri Nicastro
(UNR, rcmnicastro@yahoo.com.ar)
TEOBALDO, Mirta Elena; GARCÍA, Amelia Beatriz; NICOLETTI, María Andrea
y BEL, Rolando Bel y ROMERO, Teresa Romero (colaboradores); Hoy nos visita el Inspector. Historia e
historias de la Inspección y Supervisión escolar en Río Negro y Neuquén. 1884 -
1992; Centro de Estudios Patagónicos (CEP). Facultad de Ciencias de la
Educación. Universidad Nacional del Comahue. Departamento de Publicaciones de
la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales. Universidad Nacional del Comahue,
General Roca, Río Negro. 2005.
“Hoy nos visita
el Inspector”. Con este título sumamente sugestivo y que a la mayoría de
los involucrados en la tarea educativa le traerá a la memoria, a no dudar,
muchas vivencias, las historiadoras en Educación de la Universidad del Comahue,
continúan y van completando la tarea de divulgar los resultados alcanzados en
sus investigaciones sobre la Historia de la Educación en los ex Territorios
Nacionales y actualmente Provincias de Río Negro y Neuquén (“Estado, Educación
y Sociedad civil en Río Negro” y el más reciente “Sobre maestros y escuelas.
Una mirada a la educación desde la Historia”).
El objetivo de las autoras es mostrar la construcción
de la historia de la Inspección / Supervisión en los Territorios y Provincias
de Neuquén y Río Negro tanto en la escuela laica como en las pertenecientes a
la congregación salesiana. Son conscientes de que trabajan con una figura
conflictiva al interior del sistema educativo y en un terreno en el cual hay
muy poco investigado, más si consideramos que se trata de una región como la
patagónica en la cual los estudios sobre historia de la educación están en sus
inicios y los archivos son de difícil acceso o inexistentes.
El libro está dividido en dos partes. La primera,
titulada “Historización de la Inspección
/ Supervisión desde 1884 hasta 1992”, realiza su análisis dividiéndolo en
dos realidades políticas como fueron el Territorio Nacional y la Provincia, dos
realidades educativas como el nivel primario y el medio, para finalizar con las
transformaciones implementadas por la reforma educativa de 1996 y además las
diferencias entre los territorios de Río Negro y del Neuquén. Otorga también un
importante espacio para receptar la auto representación de los Supervisores y
la opinión que sobre estas autoridades tenían los demás integrantes del
quehacer educativo, opiniones frecuentemente desfavorables. Es interesante
también su análisis del rol ejercido por estos funcionarios frente a los
conflictos docentes que, como señalan las autoras, varió entre la política
implementada por los supervisores del Nivel Primario y los del Medio lo que les
trajo consecuencias perjudiciales, como la suspensión de concursos de
titularización, para los segundos.
La segunda parte del libro, titulada “La construcción del campo entre las
representaciones y el poder” analiza las representaciones sobre los
Inspectores / Supervisores y su relación, desde su rol de autoridad “con
capacidad de actuar sobre las acciones de los otros, articulando las políticas
educativas con la institución escuela”,entre el poder político y el magisterio.
Por medio del análisis de las representaciones acerca del “Inspector” y el
“Supervisor” y aunque indican los pocos estudios existentes sobre el tema y las
miradas disímiles recogidas entre los entrevistados, las autoras señalan las
coincidencias o diferencias existentes entre ambas y el pasaje desde una modalidad
de carácter autoritario ( el Inspector) a una más democrática ( el Supervisor)
paralelamente a una identificación cronológica referida al cambio de Territorio
Nacional a Provincia. Además de describir las dificultades enfrentadas por
estos funcionarios para ejercer su labor en territorios tan extensos y
despoblados como los de Neuquén y Río Negro, muestran las diferencias de género
existentes entre la tarea realizada por las mujeres y los varones
respectivamente. Señalan además la presencia de mujeres en el comienzo y
desarrollo del sistema neuquino.
Un aspecto a destacar es el hecho de que el texto
integra a los supervisores de los colegios salesianos.
Estas instituciones, monopolizadoras de la educación privada confesional, con
una fuerte presencia de sacerdotes carismáticos e identificadas con el “orden y
la disciplina”, muestran su plena inserción en el sistema educativo de ambos
provincias.
El Anexo de Hoy
nos visita el Inspector analiza la práctica de los Supervisores en la
elaboración de sus informes en la provincia de Río Negro y de los colegios
salesianos. Se señala en el mismo la tensión existente entre lo manifestado por
los entrevistados y lo volcado en los Libros de Supervisión entre los años de
1973 y 1981, como la ausencia de informes o su escasez, la relación horizontal
o vertical instituida por el funcionario con el personal de la escuela
visitada, el valor dado a las Circulares Ministeriales, y su presencia en las
aulas que difiere en el caso de los supervisores de Primaria y de Media. En el
caso de los informes de los colegios salesianos, tienen una presencia constante
las observaciones referidas al personal docente libremente elegido por las
propias autoridades de la Congregación. Este anexo es ilustrado con algunos
fragmentos de informes de Supervisión. Coincidimos con las autoras, desde
nuestras investigaciones de la educación en Santa Cruz, en que los Inspectores
fueron artífices fundamentales de la presencia del Estado y la escuela nacida
de la Ley 1420 en estos Territorios Nacionales. Valoramos, por lo tanto, este
aporte a la Historia de la Educación en la Patagonia Meridional llenando un
vacío de análisis sobre estos funcionarios y dando cabida a la comprensión de
esas memorias plurales al decir de Carolina Kaufmann en el Prólogo.
Por María de los Milagros Pierini
(Universidad Nacional de la Patagonia Austral.
mmpierini@infovia.com.ar)
BRIEGER, Pedro; Qué es Al Qaeda. Terrorismo y violencia
política; Capital Intelectual, Buenos Aires, 2006, 112 pp.
Pedro Brieger es analistas de política internacional, periodista y
sociólogo, es profesor de Sociología de Medio Oriente en la Universidad de
Buenos Aires (UBA) y de Geopolítica de Medio Oriente en la Maestría de
Relaciones Internacionales de la Universidad de La Plata (UNLP). Ha presentado
en la colección Claves para Todos, colección dirigida por José Nun, su último
trabajo sobre la problemática de Medio Oriente, titulado “Que es Al Qaeda”. Trabajo que es un conjunto de reflexiones sobre
el momento actual y es también una prolongación de sus trabajos anteriores, “Medio Oriente y la Guerra del Golfo”
(1.991), “Los últimos días de la URSS”
(1.991) y la “¿Guerra Santa o lucha
política?” “Entrevista y debate sobre el Islam” (1995).
El profesor Brieger nos presenta un trabajo distinto a los que estamos
acostumbrados a leer, el libro nos pinta un panorama de lo que fue y significo
la revolución iraní en el mundo islámico y como su posterior retroceso será uno
de los factores de la aparición de Al Qaeda.
El temario es muy interesante y se refleja en él la historia de Medio
Oriente, a partir de la finalización de la guerra fría. Es sumamente atrayente
como se produce el surgimiento de Al Qaeda, el autor destaca el momento, la
caída de los socialismo reales, a partir de ahí la hegemonía de EE.UU. va ser
más que notoria y es en ese instante cuando se va desarrollar Al Qaeda. Por
otro lado, a través de la lectura nos surge la duda si es real su existencia,
manejando toda una nebulosa de misterios, con respecto a su “acta fundacional”.
Las reflexiones que se trazan nos llevan a pensar y a dudar de la presencia
concreta de este movimiento y el misterio sobre la persona de Bin Laden. Ideas
que son compartidas por varios estudiosos y analistas del tema.
Pedro
Brieger toma al 11 de septiembre de 2.001, como un punto de inflexión para
hacer un análisis sobre el terrorismo, de ahora en más abra “un antes y un
después”, la política internacional va tener un vuelco, acompañado por un nuevo
concepto sobre la guerra y una nueva guerra contra un enemigo invisible.
El papel de los Estados Unidos es notorio y la aparición del término
como globalización que se convierte en algo vació de contenido y precisión.
Dando la impresión que todo lo que sucede en el mundo esta puesto en un
catalogo, es la imagen que nos trasmite Brieger de este término.
Son cuatro hechos fundamentales los que hilvanan la Globalización y los
Atentado del 11 de septiembre, dos de ellos históricos y dos ideológicos. El
primero, la caída del muro de Berlín; el segundo, el polémico articulo escrito
por Fukuyama sobre el Fin de la Historia; el tercero, la Guerra del Golfo de
1.991, donde quedan al descubierto los intereses estratégico de los EE.UU. y
cuarto, es el debate instalado por Huntington, a cerca del “choque de
civilizaciones”, planteo que se realiza como eje de la política mundial.
En este
trabajo queda bien marcado la preponderancia y la prepotencia que adquiere
EE.UU. y toda su compleja red de alianzas, para poder llevar adelante este
nuevo tipo de guerra. Temática que esta abordada también en el trabajo, donde
se aclara lo difícil que es definir el concepto del termino, terrorismo
internacional.
No deja de lado el autor el papel que juega en el conflicto América
Latina, tratando de dejar bien en claro la trayectoria de EE.UU. en las
relaciones con América Latina. Remarcando con énfasis la posibilidad que en
América del Sur existan en la Triple Frontera un centro de terrorismo islámico.
En una parte de su conclusión el autor, nos dice, “…no es posible
llegar a una definición clara de Al Qaeda porque no hay acuerdo sobre su
existencia; cuando nació, quienes la forman, cómo, si existe un liderazgo
respetado o si es una red de redes donde cada uno actúa de manera
independiente…” dando lugar a que los lectores puedan comprender el fenómeno
Bin Laden desde su punto de vista. En la parte final de su conclusión queda
bien puntualizada la posición de la Gran Potencia con respecto al
enfrentamiento del “bien” y el “mal”, que presenta su presidente Bush.
El trabajo manifiesta las razones por la cual la guerra contra el
terrorismo internacional es muy discutible desde lo ideológico, partiendo del
preconcepto que tiene la potencia hegemónica, que se puede tomar como algo
claramente maniqueo de una lucha que comienza con el ataque del 11 de
septiembre de 2.001.
Es un aporte muy bueno a la problemática de Medio Oriente y de la
calidad que nos tiene acostumbrado el Profesor Brieger.
Por Juan Aníbal Edgardo González
(ISP 3, jumapu@intercom.com.ar)
BARRIERA, Darío G.; Conquista y colonización hispánica. Santa Fe
la Vieja (1573-1660), Nueva Historia de Santa Fe, Tomo 2, La
Capital/Prohistoria, Rosario, 2006, 216 pp.
Este segundo volumen de la Nueva Historia de Santa Fe examina la
invasión, ocupación y conquista del territorio rioplatense por los europeos. En
el mismo, abordando los procesos desde la Historia Social, el autor propone
analizar las relaciones entre equipamiento del territorio, espacio, economía y
política. El tomo se halla dividido en ocho capítulos, en los que se analizan
los años que van desde 1573, fecha de fundación de la ciudad, hasta 1660,
momento de su trasmuta hacia un nuevo sitio. Debemos considerar que esta es una
obra de divulgación que no está pensada ni escrita para un público
especializado, sin embargo mantiene el rigor necesario en el análisis de los
problemas tratados.
En el primer capítulo,
“Exploración y conquista del territorio del Río de la Plata”, el autor estudia,
a través de los relatos de los cronistas, de qué manera se realizó la
exploración del territorio, cuyo objetivo principal era el descubrimiento del
paisaje y el relevamiento de datos necesarios para su posterior organización;
organización realizada desde la concepción que los propios conquistadores
tenían del espacio y donde aparecía como cuestión fundamental a resolver la
falta de ciudades.
Considerando que la ciudad
constituía, en la Europa medieval, el eje a partir del cual se organizaba el
espacio, el capítulo dos, “La conquista del litoral”, se centra en examinar el
proceso de creación de ciudades americanas, a la llegada de los conquistadores,
como piezas claves en la organización territorial y espacial. El acto de
fundación de una ciudad iba acompañado por la elección de los lugares donde
debían establecerse los símbolos del poder Monárquico, esto es el rollo de la
justicia, el Cabildo y la Iglesia; además del repartimiento de tierras entre
sus fundadores.
En el capítulo tres, “La
fundación de la ciudad: ritos, recursos, poderes y jerarquías”, ofrece una
lectura de la fundación de la ciudad de Santa Fe en función de la búsqueda de
caminos alternativos desde Asunción hacia el Perú. Ante la falta de pueblos y
ciudades. Barriera analiza los ritos fundacionales en clave política:
instalación del rollo de la justicia, nombramiento de autoridades, distribución
de la tierra son los ceremoniales donde los participantes y el escenario se
otorgaban cualidades entre sí. Los soldados recibían el título de vecinos, con
los privilegios y obligaciones que conllevaba. Para el caso de Santa Fe, el
grupo fundador estuvo constituido por hombres nacidos en el territorio
americano, a los que la élite dominante de Asunción envió a la búsqueda de
nuevas vías de salida al Atlántico, expulsándolos por haber protagonizado
revueltas contra el orden en aquella ciudad.
En el capítulo cuatro llamado
“El suelo, el lugar, su gente”, el autor aborda las características que poseía
el suelo de las ciudades del Río de la Plata (Buenos Aires, Corrientes y Santa
Fe) a la llegada de los conquistadores y cómo, frente a la falta de minerales,
estos lo percibieron siempre como muy pobre. Se detiene además en el análisis
en la notoria relevancia que adquirieron, en este espacio, la presencia de los
ríos y destaca, mediante el estudio de los padrones que se realizaron en la
ciudad, la composición de la población que vivía en Santa Fe en este período.
En “Una sede periférica de
la Monarquía Hispánica”, el capítulo cinco, se abre el análisis a partir de
considerar que la ciudad adquiría sentido
como parte de la Monarquía, una monarquía católica concebida como un cuerpo
formado de partes que debían regirse por sus mismos principios. El autor se
dedica a examinar cómo estaba integrado el Cabildo, órgano de gobierno que se
instituía, en el mismo momento de la fundación de la ciudad y se designaban a
los hombres encargados de sus funciones. Su composición se fue complejizando a
medida que lo hizo la ciudad. Así a los Alcaldes y Regidores pronto se les
sumaron escribanos, Tenientes de gobernador, Alférez Real, Fieles Ejecutores,
Alcaldes de la Hermandad, entre otros oficios y fue variando al mismo tiempo,
la forma de acceder a los mismos. En la ciudad junto con el gobierno aparece
indisociable la administración de justicia.
Para Barriera, la
administración de la justicia no recaía en un polo único, sino que en una
Monarquía policéntrica el derecho era
producido desde muchos centros, por lo que la potestad de los cargos que
poseían ciertas personas se superponían.
En “Asuntos del común: la
agricultura, el pan, el vino, los precios y el comercio”, nombre que recibe el
capítulo seis de este tomo, se estudia el rol que tenía el Cabildo como sede
del gobierno local y arena donde se dirimían los asuntos del común. Era en su recinto que se generaban disputas que
giraban principalmente en torno a la vida de la ciudad y el bienestar de sus
habitantes. El Cabildo fue el lugar donde los vecinos, únicos residentes de la
ciudad que podían participar políticamente de él, discutían sobre cómo se debía
domesticar el territorio y tomaban decisiones sobre la distribución de los
recursos de la ciudad, los precios de estos y su comercialización; esto es la
producción y la reproducción de los mismos.
En el capítulo siete “Las
cuatro patas de la economía”, Barriera propone analizar, considerando las
actividades productivas que se realizaban en la ciudad y de los recursos con
los que contaban, cuáles fueron las riquezas de Santa Fe. Partiendo de
considerar que para que la economía funcionase las cuatro patas en las que ésta
se apoyaba, a saber la vid, el trigo, el ganado y el comercio, debían estar bien
aceitadas. Los productos más importantes de la ciudad, junto con la carne, eran
la vid y el trigo, por lo que correspondía al Cabildo vigilar que estos no
escasearan. La dieta de la población dependía de ellos. El Cabildo tenía a su
cargo el remate de las carnicerías, las pulperías y el control de los precios
del vino y del abasto, al tiempo que debía determinar a quién pertenecía el
ganado, hecho que generó no pocos conflictos; otorgaba también las licencias
para vaquear y establecía el precio del ganado, que incluso se convirtió en
moneda de la ciudad. El ganado aparece como un producto de comercialización más
allá de la ciudad.
El último capítulo titulado
“Los problemas de una pequeña urbe”, el autor lo dedica a retomar algunos de
los problemas que se vivieron en la ciudad, una ciudad que se sintió
constantemente amenazada, debido a
que se hallaba rodeada de asentamientos indígenas que le imprimieron a la vida
de sus habitantes un halo de constante inseguridad. Estos indígenas fueron
vistos por los pobladores de Santa Fe como infieles
a los que era necesario pacificar y convertir. Desde la ciudad, los habitantes
de Santa Fe intentaron, por un lado, disciplinar también al medio, que al
ingreso de los conquistadores sufrió modificaciones, pero también conocerlo
como forma de prevenir cualquier desastre. El libro cierra con el análisis
sobre la trasmuta de la ciudad. Su autor sostiene que los distintos peligros a
los que la villa se encontraba sometida impulsaron a los santafesinos a tomar
la decisión capital de trasladar su ciudad a un nuevo sitio, largo proceso que
tardó diez años en concretarse.
El tomo cumple con su
objetivo ya que los procesos están
Por Evangelina De los Ríos
(UNR - eddelosrios@hotmail.com)